La trata de personas es una gran violación de los derechos humanos que afecta a millones de personas en todo el mundo especialmente a niños y a niñas quienes sufren el doble de violencia que los adultos. «Los traficantes explotan a los más vulnerables mediante trabajos forzados, explotación sexual, mendicidad y otros abusos. Las crisis globales, los conflictos bélicos y el cambio climático incrementan aún más el riesgo, dejando a muchos niños en situaciones de extrema vulnerabilidad». Por ello, «queremos poner el foco en la vulnerabilidad de los más pequeños ante este delito atroz», ha subrayado Begoña Iñarra, responsable de la Comisión Diocesana de Madrid contra la Trata de Personas.
Los miembros de esta comisión «sensibilizamos sobre esta realidad». Para combatirla es esencial que «todos nos unamos y tomemos acción». Lo primero es «conciencia y educación, así como compartir información y recursos en tus redes sociales».
Acompañar a las víctimas
La Iglesia de España y de Madrid están muy comprometidas con la lucha contra la trata. La Conferencia Episcopal Española tiene un departamento de trata que reúne a distintas comisiones, entre las que se encuentra la de la diócesis de Madrid y de otras diócesis españolas. Además, la Fundación Amaranta de las Hermanas Adoratrices, la Fundación Serra de las Hermanas Oblatas o la Cruz Blanca de los Hermanos Franciscanos, están trabajando en Madrid y en otras ciudades, «para acompañar a las víctimas, concienciar a la sociedad, hacer incidencia política para mejorar la situación de las víctimas y permitirles que disfruten de sus derechos», ha señalado la responsable.
Otra manera de participar en la lucha contra la trata hasta su erradicación es «apoyando a las víctimas, hacerte voluntario, aportando vuestro saber hacer y vuestro tiempo u ofreciendo una ayuda económica a alguna de esas organizaciones que brindan asistencia y protección en el terreno a las víctimas».
Denunciar actividad sospechosa
Begoña Iñarra ha insistido que hay que «mantenerse atento a las señales de trata en tu comunidad y así denunciar cualquier actividad sospechosa a las autoridades competentes. También podéis influir en la política y en la legislación». Por ello, «instamos a los responsables de la formulación de políticas a mejorar las leyes y a la aplicación de medidas que protejan a los niños de la trata». En este sentido, «es crucial reforzar las redes de protección infantil y adaptar la legislación penal para responder mejor a las necesidades de los menores».
Invisibilidad de la trata
El Papa Francisco nos alerta sobre la invisibilidad de la trata y la anestesia que causa la cultura de la indiferencia, nos anima a abrir nuestros corazones y a escuchar a las víctimas de la trata, conflictos, guerras y cambios climáticos especialmente mujeres y niñas. Además, el Santo Padre nos llama a soñar con un mundo de libertad y dignidad y actuar con acciones concretas impulsadas por la fuerza del espíritu de Jesucristo También nos exhorta a rezar y actuar en todos los ámbitos sociales y políticos, destacando la importancia de erradicar las causas de la trata, inmovilizar todo nuestro recurso para combatirla, si permanecemos inactivos seremos cómplices. Cada acción cuenta en esta lucha, por ello no podemos permitir que más niños sufran en silencio. En esta línea ha subrayado que juntos podemos hacer una diferencia significativa en la vida de las víctimas y trabajar hacia el mundo libre de trata de personas
Por último, Begoña Iñarra ha subrayado que «nos tenemos que unir para trabajar contra este mal. No dejemos a ningún niño atrás en nuestra lucha contra la trata».