Madrid

Madrid celebra su Círculo de Silencio de febrero en solidaridad con las personas migrantes

Como cada primer viernes de mes, Madrid acoge el Círculo de Silencio de febrero, convocado en la plaza de Callao, el día 7 de este mes, de 20:30 a 21:30 horas. Se trata de una acción no violenta en solidaridad con los migrantes que en Madrid se lleva realizando desde 2011, y que fue promovida como acción diocesana común por el Departamento de Migraciones de la Conferencia Episcopal en 2022.

Los Círculos de Silencio son concentraciones pacíficas, en silencio y en un lugar público, para interiorizar e interpelar a las conciencias sobre las situaciones de extrema gravedad que viven muchos migrantes y refugiados. Se reclama de esta manera dignidad, hospitalidad, buenas prácticas y cumplimiento de los derechos humanos. A su vez, se reivindica una sociedad que no sea indiferente, integradora, en la que todos reciban un trato digno independientemente de su origen, condición social o situación administrativa.

Los Círculos de Silencio nacieron en 2007 en Toulouse (Francia) por iniciativa de un grupo de franciscanos ante el trato injusto que deshumaniza a las personas. En España, además de en Madrid, se hacen Círculos de Silencio en Andalucía, Aragón, Asturias, Canarias, Cantabria, Ceuta, Cataluña, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, Murcia, Navarra, País Vasco y La Rioja.

Circulo silencio cartel

El cardenal José Cobo, en la festividad de santo Tomás de Aquino: «No solo las palabras, sino también las acciones, hablan de Dios»

«No solo las palabras, sino también las acciones, hablan de Dios», así lo ha expresado el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, en la Misa que ha presidido, en la Real basílica de San Francisco el Grande con motivo de los actos para la festividad de santo Tomás de Aquino. La celebración ha congregado en el templo a profesores y alumnos de la universidad y estuvo concelebrada por el cardenal José Tolentino de Mendonça, Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación; el obispo auxiliar, Juan Antonio Martínez Camino; el arzobispo castrense, Juan Antonio Aznárez Cobo; el rector de la UESD, Nicolás Álvarez de las Asturias.

Los actos empezaron en la Universidad Eclesiástica San Dámaso (UESD) con una ponencia del cardenal José Tolentino de Mendonça, Prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, y la entrega de las medallas de plata de la Universidad a la promoción 1999-2000 con ocasión de los 25 años de su graduación.

Durante la homilía, el arzobispo de Madrid se ha querido centrar en la «preocupación existencial» de Santo Tomás de Aquino por «la verdad de la vida», una verdad «que proviene de Dios en quien todo conocimiento encuentra su fundamento. Una verdad que consiste simplemente en caminar por ella ajustándose a la ley de Dios y llevar una vida recta conforme a la razón y a la voluntad del Señor». El cardenal José Cobo resaltó la importancia del silencio y la contemplación en la vida de santo Tomás para responder a las preguntas fundamentales de la existencia: «¿Quién eres? ¿Dónde quieres ir? ¿Qué quieres hacer con tu vida?».

«Estas preguntas solo se pueden procesar en un ambiente de silencio y contemplación. Es el ambiente donde sonaron las preguntas fundamentales desde su infancia. Si no hay silencio, si no nos ponemos delante de Dios con honradez, no escucharemos ni encontraremos la verdad de la vida», ha subrayado el arzobispo de Madrid.

San Damaso

El cardenal también hizo énfasis en el valor del diálogo -tanto con los maestros antiguos, a quienes Tomás consideraba sus predecesores intelectuales-, como con Dios mismo, a través de la oración. Esta interacción permitió al santo comprender que la fe y la razón son caminos complementarios para alcanzar el conocimiento y la plenitud del ser humano: «No debemos conformarnos con una visión reduccionista del ser humano que ignore sus inquietudes más profundas. Tomás luchó por la vocación que descubrió, incluso contra la oposición familiar que le quería abad de Montecasino».

Cobo destacó el compromiso y la vocación de Santo Tomás, quien, a pesar de la oposición familiar, se mantuvo fiel a su misión como fraile mendicante de la Orden de Predicadores: «He tomado la decisión de dedicarme sólo a exponer la verdad de la fe católica, de modo que no sólo mis palabras, sino mis acciones hablen de Dios». «Esa es la clave: que no solo las palabras, sino también las acciones, hablen de Dios. San Pablo VI repetía que el mundo necesitaba más testigos que maestros. En Jesús se da la síntesis más perfecta del testimonio y del magisterio. La elocuencia de los signos y la claridad autorizada de sus Palabras», ha remarcado el arzobispo de Madrid.

Tolentino San Damaso 1

En su mensaje, el arzobispo de Madrid hizo un llamado especial a los presentes para que, al igual que Santo Tomás, se conviertan en «transmisores del Verbo de la verdad» -como dice el lema de la Universidad Eclesiástica de San Dámaso- y en «acompañar vitalmente a la búsqueda del sentido de la vida, sin recetas ni respuestas simplistas a cuestiones profundas».

«Queridos amigos, que el ejemplo de Tomás de Aquino nos ayude a poner todo el empeño en estudiar y al mismo tiempo todas las energías en que nuestro estudio no sea un ejercicio de erudición, sino el mejor modo de aprender a «contar santamente a Dios» con nuestra propia vida, con la verdad de nuestra existencia».

El cardenal Cobo preside la Misa de la Asociación de Belenistas de Madrid con motivo de la fiesta de la Candelaria

La Asociación de Belenistas de Madrid celebra este martes, 4 de febrero, la primera de las dos Misas solemnes que organiza anualmente. Será con motivo de la fiesta de la Candelaria — la otra lo es en octubre, en torno a la festividad de san Francisco de Asís, creador del belén —.

La celebración comenzará a las 19:00 horas en el Real Monasterio de Santa Isabel (Santa Isabel, 48) y estará presidida por el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid. Tras las palabras del presidente de la asociación, Eugeni Barandalla, se procesionará con velas por dentro de la iglesia, e inmediatamente después comenzará la Eucaristía (en la imagen superior, celebración del año pasado).

Asociacion belenistas misa 24 belen

Al concluir se procederá a la entrega de los premios del Concurso de Nacimientos en su edición de 2024. Entre los galardonados se encuentran la Fundación ONCE, el Colegio Stella Maris La Gavia, las parroquias Nuestra Señora del Buen Suceso, San Juan de la Cruz, Santa Matilde o San Marcos, y algunos belenes instalados en negocios, como Cajas Fuertes López Hermanos, o en portales de edificios de viviendas, como el de Cochabamba, 23 (en la imagen inferior).

La celebración concluirá con la visita del cardenal Cobo a la sede de la Asociación de Belenistas de Madrid, donde podrá conocer el trabajo de esta entidad que cumple en 2025 sus 80 años de vida.

Fotos de la Universidad San Dámaso

El cardenal José Tolentino de Mendonça, en la Universidad San Dámaso con ocasión de la festividad de santo Tomás de Aquino: «La universidad es la historia de una amistad»

«Puede parecer raro delante de tantos desafíos del mundo contemporáneo hacer una charla sobre la amistad, que parece un tema antiguo y con poco para decir, porque la amistad es parte de la vida de todos los días, pero pocas veces la reflexionamos con mayor profundidad». Lo afirma el cardenal José Tolentino de Mendonça, prefecto del Dicasterio para la Cultura y la Educación, que este lunes ha realizado un «Elogio de la amistad» con motivo de la festividad de santo Tomás de Aquino que ha celebrado la Universidad San Dámaso.

En declaraciones a Alfa y Omega, el cardenal ha señalado que, «en su esencia, la universidad es una historia de amistad, porque la universidad nació de la amistad entre maestros y alumnos, que juntos buscaban la verdad». Esta amistad continúa hoy, ya que «las universidades existen porque se establece una calidad de relación, de confianza, que podemos describir como amistad entre personas para hacer juntos un camino».Tolentino San Damaso 2

En este sentido, la comunidad académica «es una asociación de amigos para la búsqueda de la verdad», y en la universidad «se aprende a ser amigo, antes de todo, de la verdad». Así, el paso por las aulas «debe ampliar nuestra sed de verdad», pues constituye «un laboratorio de búsqueda». De este modo, la amistad por la verdad y el conocimiento «nos debe definir absolutamente» y apuntar «a una dimensión práctica», formando a los alumnos «para objetivos muy concretos, pensando en ser útil», lo cual no debe eclipsar «la pasión por la búsqueda de la verdad».

En relación con esta búsqueda, ha habido en España un debate interesante en los últimos años, pues hay quien ha echado de menos más visibilidad de los intelectuales católicos en el mundo de la cultura y de las artes. ¿No hay suficientes católicos en esos ambientes, o es más bien una cuestión de audacia a la hora de mostrar públicamente la propia fe? El cardenal Tolentino responde que «nuestras sociedades democráticas son sociedades plurales y polifónicas, en las que son necesarias y valoradas todas las contribuciones». Por este motivo, «no se entiende la persona humana, su destino, su deseo más profundo, su dignidad y realidad, sin la clave de la religión», de ahí que hablar desde el punto de vista de la religión sobre las cuestiones vitales del ser humano «es imprescindible».

Tolentino San Damaso 1

De la misma manera, «la contribución que hace la visión cristiana de la vida y la existencia humana es única, y la vida democrática se empobrece de modo muy preocupante si se descarta esta contribución». Por ello, «es muy importante que los cristianos estén en la vida pública y reflexionen partiendo de las fuentes de su fe, del magisterio y de la doctrina social de la Iglesia y establezcan un diálogo social muy cercano, presente, en todos los medios, los tradicionales y los nuevos medios digitales».