Madrid

El cardenal José Cobo clausura la visita pastoral al arciprestazgo de Alcobendas- San Sebastián de los Reyes, en Nuestra Señora de la Moraleja

Durante el mes de marzo, el obispo auxiliar de Madrid, Juan Antonio Martínez Camino ha realizado la visita pastoral a la parroquia Nuestra Señora de la Moraleja. El párroco, Alfonso Sánchez-Rey López de Pablo afirma en una carta que monseñor Martínez Camino ha tenido la posibilidad de palpar el día a día de la parroquia, con sus distintas realidades que hay en ella y las diferentes actividades que se realizan. «Vosotros, los feligreses, también habéis tenido la oportunidad de mostrarle cómo tratamos de hacer vida la fe de la Iglesia».

Clausura

Este domingo, 30 de marzo, el cardenal José Cobo, clausura la visita pastoral al arciprestazgo de Alcobendas- San Sebastián de los Reyes. La misa se celebra a las 12:15 horas en la parroquia Nuestra Señora de la Moraleja.

«Es un buen momento para que todos los feligreses de Alcobendas y San Sebastián de los Reyes puedan estar con nuestro cardenal», concluye el párroco.

Sant'Egidio estrena la XV edición de la Guía 'Dónde 2025', un mapa de la solidaridad en Madrid para «construir entre todos una ciudad más humana y fraterna»

«Conozco la Comunidad de Sant’Egidio por mediación de otra persona a la que le conté que no administro bien el dinero. Entonces me dijo: “Allí te pueden ayudar a lograrlo y a conseguir una habitación”». Lo cuenta Antonio a Alfa y Omega, sevillano afincado en Madrid desde hace diez años, sentado en una de las mesas de la Casa Fratelli Tutti que este movimiento internacional de laicos tiene en el barrio de Justicia. Haciendo scroll con su teléfono, nos enseña la versión más reciente de una de las primeras herramientas con las que logró salir de la calle, la «dónde comer, dormir y lavarse». Calificada por algunos como «la Guía Michelin de los pobres», este documento actualizado el pasado viernes a los últimos cambios en la gran ciudad explica —tal y como reza su subtítulo sin ningún misterio— «dónde comer, dormir y lavarse». Según el sevillano, que ha conocido la calle y diferentes instituciones, «hay otras entidades con un resumen para salir del paso, pero ninguna guía es tan completa». Con esta, ya se han publicado desde 2010 un total de 15 ediciones.

Antonio nos explica que «no la conocía y me la encontré por casualidad cuando tenía más necesidad». «Te dice dónde están los albergues, los comedores y los metros que hay cerca para poder llegar», apunta. De aquello han pasado diez años. Hoy está en una situación más estable, aunque sigue requiriendo de apoyos. «Una persona que es un pilar en Sant’Egidio tiene mi tarjeta de crédito y me va dando el dinero poco a poco. Así tengo lo justo y llego bien a final de mes porque, si tienes el dinero encima, siempre vas picoteando». Fruto de este programa de contención —y de la confianza en quien se ha convertido en un amigo— poco a poco va acumulando unos pequeños ahorros.

Empadronado en Madrid y beneficiario de la Renta Mínima de Inserción autonómica, Antonio cuenta también que «una vez que la cobras, los albergues te dicen que ya no puede estar ahí y tienes que buscarte una habitación». Por tanto, dedica casi todos sus ingresos a pagar el alquiler de un cuarto a un precio desproporcionado. «Ha subido mucho, la vivienda está muy cara y muy difícil», señala.

Manuela Pérez, presente en la conversación y responsable del servicio Amigos en la Calle de la Comunidad de Sant’Egidio, toma la palabra: «Algunos amigos nuestros que estaban en habitaciones gracias a sus ingresos mínimos vitales podían organizarse con apoyos y comedores. Pero debido a las últimas subidas muchos han vuelto a la calle aun teniendo prestaciones». Una situación que, «si ya era un drama para personas como Antonio, no te quiero contar para las familias con menores. Nadie alquila habitaciones cuando hay pequeños». «Faltan ideas creativas para dar salida a esta problemática tremenda», denuncia.

No todo es comer y dormir

Durante la charla con Alfa y Omega, Antonio cita a Winston Churchill, Arquímedes y un proverbio chino: «El hombre que mueve montañas empieza apartando piedras pequeñas». Explica que «he leído muchos libros de inteligencia emocional y de desarrollo personal». Algo que le ha ayudado a «que la autoestima vaya estando bien». Según nos explica, «intento hacer cambios y salir de mi zona de confort. Cada día voy a la biblioteca un par de horas y, cuando me canso, voy caminando a otra y estoy dos horas más». Para esto también es fundamental el listado que incluye la guía Dónde 2025. Como se ve, el sevillano la sigue utilizando para consolidar su situación de seminormalidad aunque ya tenga un techo.

«No solo pensamos en que la persona tiene que comer, ducharse, vestirse o dormir», reivindica Pérez. «Antonio y muchos amigos pasan la mañana leyendo. No es ninguna tontería y da mucha personalidad a esta guía», que alimenta la autonomía de las personas en situaciones vulnerables y comprende —una asignatura pendiente para otras instituciones— que el día es para más que ir de un comedor o de un recurso a otro, haciendo largos trayectos por la ciudad.

De hecho, la guía «Dónde 2025» también recoge servicios para la búsqueda de empleo o de asesoramiento jurídico, para que las personas que den con ella puedan regularizar su situación lo antes posible. Además, como explica Pérez, desde la Comunidad de Sant’Egidio «hemos acompañado muchos juicios».

Parafraseando de nuevo al sabio griego, Antonio sentencia: «Dadme un punto de apoyo y moveré el mundo». Algo que ya está logrando. De hecho, con la guía en la mano, a menudo comparte sus trucos con personas en situaciones más críticas que la suya. «Hay un boca a boca, nos vamos informando y a muchas personas que han llegado nuevas a Madrid les he explicado los sitios clave», recuerda.

Santos Urías, delegado de Pastoral para el Centro: «Muchas comunidades hemos manifestado inquietud y preocupación por el tema del sinhogarismo»

¿Qué es la Delegación de Pastoral para el Centro y qué hace?

Empezó en noviembre de 2023. Lo primero que hemos hecho es acercarnos a las parroquias de la zonaSon 19 y abarcan la almendra central de Madrid. Hemos escuchado a estas comunidades y nos hemos puesto a su disposición, porque la principal tarea es generar espacios de mayor coordinación y comunión. Ya se hace y hay muchísimas cosas.

¿Qué tiene en común la feligresía de estas iglesias?

Son parroquias con un gran número de personas de paso o que acuden a ellas, pero no viven en su demarcación. También hay una realidad migrante que, en muchos casos, es itinerante. Vienen directamente al centro, están un tiempo y se trasladan a otros lugares más asequibles. Algunos templos tienen muy desarrollado el tema cultual, celebrar la Eucaristía y atender confesiones. Otras parroquias desarrollan más el cultural, que tiene que ver con conciertos o visitas guiadas. En algunas no hay mucha comunidad propia, pero sí una inquietud por intentar servir. Una de las cosas más bonitas de las visitas es que en todas ellas hay un deseo muy grande de vivir el Evangelio.

¿A qué problemas se enfrentan los fieles?

Uno de los problemas de los feligreses en estos barrios es la gentrificación. A veces hay viviendas que se utilizan para alquiler turístico. Hay templos que han desarrollado una pastoral con un enfoque hacia el turista, pero hay que ver cómo desarrollar comunidades que tengan cierta vida y vincularlas a la Iglesia de Madrid. También nos encontramos con parroquias que ya no tienen catequesis de infancia; sí de iniciación en la fe, enfocada a gente que participa en la religiosidad popular y no está confirmada. Son particularidades que, aunque existen en el conjunto de la diócesis, aquí están mucho más acentuadas.

¿Qué proyectos específicos se están abordando en común?

Algunas cosas de perfil social. El centro abarca tres vicarías, la III, la V y la VII. Hasta ahora, la coordinación con las concejalías de Centro y de Servicios Sociales la hacían las vicarías una a una. Estamos intentado hacerla de forma más articulada. Hemos tenido encuentros muy interesantes con el jefe de Servicios Sociales del distrito Centro, Javier Pomar. Hay buena relación. Algunos temas nos preocupan mucho, como el sinhogarismo. En el centro están en esa situación un número notable y llamativo de personas. Bastantes comunidades hemos manifestado esta inquietud y preocupación. 

¿Tienen interés en formarse los feligreses del centro?

Se ha propuesto un taller de escucha, acompañamiento y acogida que ha hecho la parroquia de la Santa Cruz. Ha durado dos jornadas. Estaba pensado para unas 15 personas, pero participaron 18 y hubo lista de espera. Fue un taller muy interesante que abrió la puerta a la inquietud de alguna gente. Otros se han enfocado en la formación para la escucha, en abordar las situaciones de la gente que está en la calle o en la propia acogida dentro de la comunidad. Por ejemplo, hay gente que pasa por la iglesia y pregunta por una cuestión personal, por cómo incorporarse a un proceso pastoral, por una cuestión de ayuda social o por los horarios de Misa. Hay que ver cómo hacer una acogida más articulada y sensible.

¿E iniciativas de espiritualidad?

Hemos abierto El Desierto en la Ciudad, un espacio de oración basado en el nombre y la idea de un libro de Carlo Carretto de los años 80 del siglo XX. Hemos propuesto un retiro mensual, los últimos sábados de mes de 10:30 a 13:30 horas. La acogida ha sido muy buena. El primero lo dirigió una oblata en las Góngoras, el convento de las Mercedarias Descalzas al lado de Chueca y Santa Bárbara. Hubo unas 40 personas y un ambiente muy bueno. Un segundo encuentro lo dio el jesuita Pablo Guerrero en las trinitarias de Lope de Vega, por la calle Huertas. Son sitios contemplativos. Fuimos unas 60 personas y estuvo muy interesante. Vamos viendo cómo la gente está participando.

¿Hay trabajo en red con la Delegación de Piedad Popular?

El delegado, Carlos Aguilar, y yo nos hemos reunido en cuatro ocasiones y hemos estado viendo la posibilidad de ir acompañando procesos, especialmente cuando hay necesidades de formación. Hay un buen número de realidades de religiosidad popular en el centro y tenemos que trabajar para poder vivirlo como una riqueza de la archidiócesis. Todo eso genera vínculos de pertenencia. La religiosidad popular encarna una serie de posibilidades, como el Papa Francisco nos decía, para trabajar la vinculación con el conjunto de la Iglesia. En la religiosidad popular hay gente que participa, es una realidad que llama. La cuestión es cómo acompañarla y cómo ayudar a los sacerdotes. Ellos son la mayoría de las veces los directores espirituales de los miembros de las hermandades. Tenemos una persona dentro del equipo encargada de esto.

Inauguración de la exposición ‘Estrella y Corona de Madrid. Huellas de una mujer’, en el IV centenario de la muerte de la Beata María Ana de Jesús, copatrona de Madrid

La Sala La Lonja, de la Casa del Reloj acoge este lunes 24 de marzo, a las 19:00 horas, la inauguración de la exposición ‘Estrella y Corona de Madrid. Huellas de una mujer’, con motivo del IV centenario de la muerte de Beata María Ana de Jesús.

La exposición se puede visitar desde el martes 25 de marzo al 19 de abril, de lunes a sábado de 9 a 21 horas.