Publicamos a continuación las conclusiones de la XVI Jornada Diocesana de Apostolado Seglar, celebrada en el Seminario Conciliar el 20 de febrero, con el lema Laicos en salida, en la vanguardia de la Nueva Evangelización. Han sido redactadas por una Comisión compuesta por Concha García Prous, María Soledad Cosmen García y Antonio González Carballo.
Líneas por donde caminar
Teniendo en cuenta lo que nos dice el papa Francisco (EG 112): «El principio de la primacía de la Gracia debe ser faro que alumbra permanentemente nuestras reflexiones sobre la evangelización», y partiendo del diagnóstico del Papa Benedicto XVI, al comienzo del Año de la Fe en el que habló del «cansancio de la fe» y la «desertificación espiritual» en nuestra Europa; porque deseamos ser discípulos-misioneros como nos invita el Papa Francisco, Nos Proponemos:
1) Ponernos a la escucha de lo que nos dice el Espíritu
- Dios es el que Evangeliza.
- Los apóstoles a la hora de crear la Iglesia no redactaron una constitución ni unos reglamentos, no, se limitaron a orar, ponerse a disposición de Dios y dar a conocer su Palabra.
- Es preciso renovar el encuentro con Jesucristo y confiar en el Espíritu Santo.
2) Aceptar el mensaje (Necesidad de la conversión)
Como nos dice el Papa Francisco, es preciso aceptar que
- Dios va siempre por delante «nos primerea».
- Plantear la acción del Iglesia como un secundar el Plan de Dios (homilía del Papa Francisco en la apertura del Sínodo extraordinario de la Familia).
- No esconder la cabeza ante los problemas sino, puesto que la Iglesia se sabe asistida por el Espíritu Santo, confiar en que con su Gracia es posible renovar las cosas, volver a empezar.
- Permitir que la Alegría de la Fe entre en nuestra vida (EG 83)
3) Salir a evangelizar
- Es preciso arriesgar, el Señor no defrauda.
- Meternos en la vida cotidiana de los demás (lo hemos visto hecho vida en el Panel de Experiencias: Presencias Evangelizadoras significativas en los diversos ambientes), sin esperar ver los frutos.
- Hacerlo con la humildad de conocer que no es mi persona, ni mi grupo, ni mi movimiento, ni mi parroquia... sino el Señor el que Evangeliza.
- Revestirnos de aguante apostólico. Paciencia (EG 24)
- Dar la vida para que la Palabra sea acogida y se manifieste su potencia (EG 24)
- Celebrar y festejar cada pequeña victoria (EG 24).
Como nos dijo el Papa Benedicto XVI en su despedida de la JMJ de Madrid 2011: «A Cristo, por la Virgen en la Iglesia».
Con el Papa Francisco queremos concluir: «¡No nos dejemos robar la alegría de Evangelizar!».
Sábado, 20 de febrero de 2016