- Titulo: Sandra Madrid
- Firma: José Luis Guzón, delegado episcopal de Enseñanza: «Defiendo y animo a la utilización de la música como recurso en las clases de religión»
En la inauguración del curso para profesores de Religión de la Universidad de Otoño, que este año tiene como tema “Música y Religiones”, el delegado episcopal de Enseñanza de la Archidiócesis de Madrid, José Luis Guzón ha comenzado su intervención partiendo de una reflexión sobre la esencia del profesorado de Religión.
«No lo somos por casualidad, sino que, más incluso que en otras materias, estamos vocacionados. Hemos elegido impartir esta materia para la cual nos hemos preparado y formado». Sin olvidar, que «tenemos un papel muy importante en la formación de nuestros alumnos ya que nos ocupamos de una dimensión fundamental del ser humano: la trascendencia».
«Más allá de los contenidos, situaciones de aprendizaje, evaluaciones… o mejor aún, a través de toda esta labor docente, facilitamos el desarrollo de aspectos fundamentales para el equilibrio personal y también de la sociedad a la que pertenecemos». Ciertamente, «es una asignatura que no siempre está valorada adecuadamente, tanto por las administraciones como por los claustros, las familias e incluso por los alumnos. Pero no podemos dejar que estas circunstancias (muchas veces adversas) minen la valía de nuestra profesión», ha recordado Guzón.
La música, igual que la religión, acompañan la vida humana desde su nacimiento,hasta su muerte, esto revela que forman parte de nuestra condición humana. pic.twitter.com/iiox7l8q2h
— DELEGACIÓN EPISCOPAL DE ENSEÑANZA MADRID (@dee_archimadrid) September 16, 2024
«Una asignatura diferente al resto»
También ha señalado que saben por experiencia que «la simpatía o aversión por una asignatura depende en gran medida del profesor que nos la haya impartido. Hemos de aprovechar las circunstancias actuales para convertir la clase de religión en una especie de "oasis", de espacio "verde", libre de presiones académicas para crear un ambiente distendido, favorable, receptivo…».
En este sentido ha recordado que «es una asignatura diferente al resto. Pensemos qué tipo de profesor soy y cómo quisiera que fueran mis clases. No estamos solos en esta tarea. Es misión de la Iglesia, somos enviados y formamos parte de algo más grande que nos alienta y nos sostiene. Trabajamos no en nombre propio, sino en nombre de Jesús. Pensemos que para muchos de nuestros alumnos somos la única referencia religiosa que tienen o/o van a tener en su vida. Esto no para asustarnos, sino precisamente para empoderarnos y ser conscientes de la enorme responsabilidad que tenemos entre manos. Por ello, «confiemos en nuestras posibilidades… otros lo hacen, porque realizamos un servicio precioso a personas concretas, a la sociedad y a la Iglesia».
«Es como un poliedro con muchas caras»
«Así como en matemáticas, lengua, historia o biología hay unos contenidos y procedimientos, hemos de ser conscientes de que nuestro objeto de estudio tiene su complejidad. Dicha complejidad no es sino una enorme riqueza». En este aspecto, José Luis Guzón ha recordado que «la religión es el conjunto de creencias de un pueblo, así como las prácticas religiosas que de ella se derivan». Según la definición de la RAE, «es el conjunto de creencias o dogmas acerca de la divinidad, de sentimientos de veneración y temor hacia ella, de normas morales para la conducta individual y social y de prácticas rituales, principalmente la oración y el sacrificio para darle culto».
La religión es como un poliedro con muchas caras y casi todas aparecen en el aula de una manera u otra: ritos (sacramentos); celebraciones y fiestas (ciclo litúrgico); compromiso social (que emana del Evangelio); valores del Reino, Moral (como consecuencia de poner en práctica estos valores); testimonio (santos, testigos, organizaciones); Revelación (historia de la salvación; Sagrada escritura (la Biblia con sus grandes relatos - los mitos - y personajes importantes); Oración (la forma de relacionarse con Dios); estructura y organización de la Iglesia (laicos, consagrados, sacerdotes, obispos, parroquias, diócesis); Historia de la Iglesia; Dogmática (lo que creemos); Mariología; Cristología; cultura religiosa y arte sacro (arquitectura, pintura, música)…
«Precisamente en esta última dimensión enganchamos con la presencia (necesidad) de la música en la vida de la Iglesia, que es una realidad desde el principio de su existencia y que tiene simplemente una función ornamental. Dentro de la música, el canto tiene unas características propias que lo hacen totalmente pertinente para la transmisión de la fe». Por esta razón, ha defendido y animado a la utilización de la música como recurso en las clases de religión.
“El que canta ora dos veces”.
— DELEGACIÓN EPISCOPAL DE ENSEÑANZA MADRID (@dee_archimadrid) September 16, 2024
Las edades del hombre : “ La música calma a las personas ,mansa a las fieras y aplaca a los dioses “ . “ La música puede dar nombre a lo innombrable ….” pic.twitter.com/XeCKfwPwcp
«Música y religión tienen mucho en común»
Además, el delegado episcopal de Enseñanza ha explicado que «si la música es parte de nuestra vida, de la de todos, sin duda para los jóvenes es aún más significativa, más relevante, porque desarrolla y acompaña todas dimensiones de la persona humana: la dimensión lúdica; artística; emocional; cultural, social (familia, amigos) y espiritual».
«Música y religión tienen, por tanto, mucho en común: nos proporcionan placer, belleza, emoción, razón, cultura, trascendencia… todas estas experiencias son posibles vías de acceso a Dios». En este sentido, ha afirmado que «la relación entre los jóvenes y la música es un vínculo permanente y muy potente, por eso es necesario integrarlo en nuestro quehacer». Por ello, «para que el aprendizaje sea significativo es necesario hablar sus lenguajes».
El curso profesores de Religión
El Colegio Profesional de Docentes acoge desde los días 17, 24, 25 y 26 de septiembre, el curso para profesores de Religión de la Universidad de Otoño. Organizado por la Delegación Episcopal de Enseñanza de la Archidiócesis de Madrid, en colaboración con el Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y en Ciencias de la Comunidad de Madrid.
Más información en este enlace