Durante los días 5 al 14 de diciembre (ambos inclusive) se desarrollará una Peregrinación a Tierra Santa, con salida de Madrid, organizada por los PP. Franciscanos (Custodios de Tierra Santa) con la Asociación de Ayuda Humanitaria a Tierra Santa ‘Estrella de Belén’. Con la visita de los peregrinos se ayuda al Culto, conservación y mantenimiento de los Santos Lugares, y a la relación y contacto con los cristianos de Tierra Santa (Piedras vivas de la Fe).
Información: Asociación de Ayuda Humanitaria a Tierra Santa ‘Estrella de Belén’. Tel. 650 544 575 / 620 105 459 Email: pastores¬¬Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
El obispo de Puerto Ayacucho, Venezuela, el español José Ángel Divassón, explicó los “milagros” que hace para que los pocos recursos con los que cuenta den el máximo fruto. Junto a él, dos administradoras del dinero del DOMUND en España, una en la Delegación de Orense y otra en la Dirección Nacional de las Obras Misionales Pontificias, explicaron ayer en el acto de clausura del espacio “El DOMUND al descubierto”, el recorrido del dinero del DOMUND, desde la generosidad del católico que lo entrega hasta las misiones. Una mesa redonda moderada por el vicesecretario para Asuntos Económicos de la CEE, Fernando Giménez Barriocanal.
Monseñor Divassón representaba ayer a los miles de misioneros que tienen sus mismos criterios respecto al dinero: “procuramos usarlo bien, porque somos conscientes del esfuerzo de mucha gente que ha dado su ayuda”. Pero, ¿qué recorrido hace el dinero hasta que llega a los misioneros? Lo explicaron Josefa Ledo, de la administración de las OMP en Orense; e Isabel Santiago, de la administración de la Dirección Nacional de OMP.
Ledo se refirió sobre todo a la “austeridad” con la que se trabaja en las 70 Delegaciones diocesanas y al modo en el que recogen el dinero del DOMUND. La mayoría sigue llegando en efectivo, sobre todo el que procede de parroquias, que como dijo la administradora de Orense “es un dinero que huele a la humedad de las sacristías de los pueblos gallegos, que es como el olor a incienso”. Pero también llegan aportaciones de los colegios (en este caso sobre todo a través de transferencias bancarias); y otras cantidades, se reciben por domiciliaciones periódicas de particulares. A todos los donantes, la Delegación de Orense expresa su agradecimiento, procurando cuidar mucho el trato personal y el trabajo bien hecho.
Isabel Santiago explicó la labor de la Dirección Nacional, donde se aúnan las contabilidades de todas las diócesis, para ponerlo a disposición – sin enviarlo, ya que va directamente desde España a misiones – del Fondo Universal de Solidaridad de Roma, como hacen el resto de los países. La Dirección Nacional procura “rentabilizar al máximo el dinero de los misioneros”, sin asumir riesgos y garantizando el capital. Los directores nacionales reunidos en mayo en Roma hacen un reparto equitativo de los fondos (un 35% se destinará al mantenimiento ordinario de las diócesis, un 55 % a proyectos extraordinarios como puede ser la reconstrucción de una capilla o un seminario, y un 10 % se reserva para emergencias, casi siempre vinculadas a desastres naturales como emergencias o inundaciones). Después se envían las órdenes de pago del dinero que, a través de las Nunciaturas, lo hacen llegar a los territorios de misión.
Mons. Divassón explicó los “milagros” que hace para que los pocos recursos con los que cuenta den el máximo fruto en el Vicariato Apostólico de Puerto Madonado. A través de Obras Misionales Pontificias (OMP), el Vicariato (que tiene una superficie que ocupa más de la tercera parte de España), ha recibido este año una ayuda de 70.000 dólares. Recibir el dinero es el primer paso, pero luego es fundamental hacer una buena gestión, sobre todo teniendo en cuenta los múltiples problemas a los que se enfrenta el obispo: desde la ausencia de una entidad bancaria en Puerto Ayacucho, hasta la lucha contra el “asistencialismo” que ha prevalecido en la mentalidad indígena (la mitad de la población), y de la que se empieza a salir poco a poco; el precio y la falta de disponibilidad de la gasolina. Además de la ayuda de las Obras Misionales Pontificias, el Vicariato cuenta con la de otras instituciones católicas, incluida Cáritas de Pamplona – Mons. Divassón es navarro - que le permiten afrontar otros proyectos como una humilde estación de radio y TV o el arreglo de algunas de las capillas sembradas a lo largo de los ríos.
El acto fue clausurado por el arzobispo de Toledo y presidente de la Comisión Episcopal de Misiones, Braulio Rodríguez Plaza, que agradeció la disponibilidad del Centro Cultural Arganzuela y la dedicación de todas las personas que han hecho posible este “DOMUND al descubierto”.
Más de 120 personas de la Vicaría V de Cáritas Madrid se encontraron el pasado jueves para reflexionar sobre nuestro compromiso como voluntarios, desde el Espíritu de ser "Tejedores de Esperanza".
Para animarnos y compartir con nosotros este propósito, nos acompañó Sebastián Mora, Secretario General de Caritas Española, que nos aportó claves sugerentes para la práctica de nuestro estilo de vida como agentes de Cáritas y transformadores de una difícil realidad social que nos lleve a una vivencia y compromiso de Esperanza.
Estas claves son las siguientes:
1.- Un nuevo tiempo de manifestación de Dios. 2.- Una forma de mirar la realidad proyectándola desde la Esperanza de la Fe que nos mueve. 3.- Receptivos al clamor de las gentes. 4.- Acompañamiento - tejer comunidad - Caridad Política desde la protesta y la propuesta.
Después de la reflexión pudimos compartir en pequeños grupos lo vivido y escuchado.
El encuentro finalizó con un espacio de oración personal y compartida.
Quién no ha soñado alguna vez, aunque solo sea por un instante, con poder volar o pilotar un avión. Muchos de las personas que estamos en los proyectos de "Nuestra Señora de Valvanera" sí, y por eso la invitación de un voluntario a asistir al Festival Aéreo “Aire 75”, con motivo del 75 aniversario del Ejército del Aire, nos emocionó enormemente. La ilusión en el tren, camino de la base de Torrejón de Ardoz, era palpable.
Más de 100 aeronaves españolas y de otros países participaron, el sábado, en el Festival Aéreo `Aire75`, una gran exhibición abierta al público en general, a la que acudieron muchas personalidades como el Rey o nosotros.
Además, en la exposición estática pudimos ver de cerca aeronaves tan representativos como el cazabombardero Eurofighter, los aviones Harrier de la Armada o los helicópteros Chinook del Ejército de Tierra. También un Airbus A400M, el avión de transporte militar del que el Gobierno ha encargado 27 unidades, aunque la primera no será entregada hasta enero de 2016.
Aprendemos a "volar" nuestra vida
Tuvimos oportunidad de hablar con algún piloto y de hacerle distintas preguntas, sobre su experiencia en el aire, que después nos hizo pensar que se asemejaba a nuestra vida. Nos contaron que cuando uno empieza a volar siente que el avión tiene vida propia, que nunca podrá controlarlo, pero pasadas algunas horas de vuelo, empiezas a sentirte cómodo. En nuestro caso, cuando uno empieza a salir de una difícil situación, como nos pasa a muchos de nosotros, creemos que nunca podremos controlar nuestra propia vida, pero pasado un tiempo, a veces meses o años, empezamos a disfrutar del arte de vivir.
A través de lo educadores, psicólogos, trabajadores sociales… y voluntarios aprendemos a cómo manejar nuestra vida y nuestras situaciones. Aprendemos a realizar la inspección pre-vuelo, aprendemos a conocernos, a analizar nuestra vida y sus secretos, te das cuenta que hay muchas cosas que se pueden ajustar, a veces de una forma más sencilla que otras. Aprendemos a llenarnos de optimismo, de valentía, de motivación… para luchar por salir adelante. Nos acompañan para saber qué hacer en cada situación que nos vamos encontrando, la posición de los “mandos”, potencia que debes de ajustar, en resumen, a pilotar tu vida. Cuando realizas tu primer “vuelo” ya empiezas a sentirte piloto de tu propia vida, pero todavía necesitamos seguir acompañados, guiados… para no estrellar el avión.
El día terminó con un café en Torrejón, ya que la lluvia no nos permitió seguir disfrutando de la visita. Tanto residentes como voluntarios nos lo pasamos muy bien.