Este domingo, 12 de noviembre, la basílica pontificia San Miguel (c/San Justo, 4) acogerá la celebración de una vigilia con catequesis para parejas. Se trata de un día recogimiento espiritual, llamado «oración y catequesis», dirigido especialmente a parejas de novios, prometidos o casados recientemente.
Durante el encuentro, se rezará en silencio y en actitud de adoración ante el Santísimo Sacramento. Después habrá una breve catequesis, que versará sobre el primer ciclo de la Teología del Cuerpo de San Juan Pablo II titulado En el principio (¿No habéis leído que al principio el Creador los hizo hombre y mujer? Mt 19, 4).
En este enlace se puede consultar el calendario de todo el curso.
Todos los segundos domingos de mes, la parroquia San Germán de Constantinopla (c/General Yagüe, 26) acogerá un retiro para novios y matrimonios. Se desarrollará con el siguiente programa:
12:00 horas – Acogida en guardería de los niños
12:30 horas – Enseñanza y oración personal
13:30 horas – Eucaristía
14:30 horas – Comida
16:00 horas – Oración en pareja
16:30 horas – Adoración y oración comunitaria
17:00 horas - Despedida
El próximo se desarrollará el domingo 12 de noviembre.
Titulo: Infomadrid / Juan Luis Díaz Vázquez-Mayordomo / Fotos: José Luis Bonaño
«Celebrar a los mártires es celebrar el amor de Dios», ha dicho el cardenal Angelo Amato, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, durante la beatificación de 60 mártires de la familia vicenciana que ha tenido lugar este sábado en el palacio de Vistalegre, en Madrid.
«En España se realizan con frecuencia beatificaciones de mártires», ha recordado el cardenal Amato. «La Iglesia hace esto con un doble propósito: invitar a los fieles a permanecer firmes en la fe, y animar a todos a evitar el terror de esos años oscuros». Por eso, los mártires «son una oportunidad para ensalzar la fuerza del bien que vence al mal».
«En aquellos años no se respetaba ni la vida ni las ideas de los demás», ha continuado el prefecto de Causas de los Santos, «y parecía que el único objetivo era aniquilar a la Iglesia católica. Fue un vandalismo ciego e ignorante, una tormenta que asoló violentamente la nación, cubriéndola de cadávere». En este contexto, los mártires «fueron asesinados por la única razón de ser católicos. El tesoro de la caridad de estos testigos provocó el enojo de los partidarios del mal, falsos profetas que animaban a destruir la Iglesia y a matar, pero ellos respondieron con generosidad y sacrificio».
Para el cardenal Amato, hoy su testimonio «nos invita a nosotros a seguir su ejemplo de fe y caridad en la vida cotidiana, y a orar por sus verdugos, ofreciendo también nosotros el regalo precioso del perdón». «No podemos ni debemos olvidar a estos mártires, porque son un testimonio de vida cristiana. Y no debemos ni podemos olvidar esta trágica historia para que no se repita nunca esta oleada de odio fraticida», ha concluido el cardenal Amato.
En este sentido, el cardenal Osoro, arzobispo de Madrid, ha destacado al final de la ceremonia que «la Iglesia no puede olvidarse de estos hijos suyos que unieron su sangre a la sangre de Cristo». Ha subrayado asimismo que «Madrid es una Iglesia de mártires, en la que se veneran los restos de 440 santos y beatos mártires del siglo XX cuyos restos reposan en el territorio de nuestra Provincia Eclesiástica», y pidió a todos ellos interceder «por la concordia, la paz y el progreso de toda España».
Finalmente, el superior general de la Congregación de la Misión y de las Hijas de la Caridad, el padre Tomás Mavric, ha ensalzado el testimonio de sus hermanos declarando que «estos miembros de la familia vicenciana llevaron con fidelidad dos experiencias decisivas iniciadas por san Vicente de Paúl: la caridad y la misión. Que su beatificación sea para todos nosotros un estímulo para crecer en la fidelidad a nuestra vocación».
Además del cardenal Amato y el cardenal Osoro, han concelebrado otros cinco cardenales, el nuncio de Su Santidad en España, obispos, vicarios episcopales y numerosos presbíteros. Y han participado más de 3.000 personas en la ceremonia. La celebraciones continúan este mismo sábado y este domingo, con una Misa de acción de gracias en la catedral de Santa María la Real de la Almudena, a las 10:30 horas, presidida por el arzobispo de Madrid.
La oración litúrgica es el tema de la Escuela de Otoño que organiza la Vicaría II. Se impartirá los sábados 4, 11, 18 y 25 de noviembre en la sede de la Vicaría (c/Ignacio Ellacuría, 2) desde las 11:00 hasta las 12:30 horas de la mañana. Los temas que se abordarán en la misma son: La liturgia, escuela de oración; La comunidad orante de hoy; Las antífonas del Adviento; y Apuntes del rito mozárabe.