En el comienzo de la Navidad, la vida nuevamente pone a prueba la capacidad de permanecer en la esperanza.
Así lo están viviendo las más de 442.000 personas desplazadas y afectadas por las tremendas consecuencias del súper tifón Rai que azotó una parte importante de Filipinas hace unos días, y que ha dejado a su paso casas totalmente destrozadas y serias afectaciones en las infraestructuras básicas (agua, comunicaciones, luz, carreteras, hospitales, etc.).
Según van llegando los rescatistas a las zonas más dañadas, especialmente las provincias centrales de Cebú y Bohol, va en aumento el número de víctimas y el número de desaparecidos.
Los vientos con ráfagas de hasta 270 km/h, unido a las tremendas lluvias, han causado serios estragos y el ambiente es de desolación generalizada en el país.
Entre las personas más afectadas se encuentran hermanas y formandas de la congregación de las Hermanas Oblatas, que poco a poco están logrando contactar con sus familias y experimentando el agradecimiento por no haber perdido vidas, pero a la vez una profunda impotencia y tristeza. De momento, han contabilizado un total de 56 familias seriamente perjudicadas, incluyendo las 5 formandas que ya no tienen casas, y familiares directos de hermanas a quienes les voló el techo de la casa y empiezan a tener dificultades para conseguir alimentos. Su impotencia se une a la de las mujeres atendidas en el proyecto que sufren percances similares justo a las puertas de nuevas tormentas, sin tener cómo reconstruir sus casas ni dónde refugiarse.
Las escasas ayudas del Gobierno empiezan a llegar. También la congregación de las Hermanas Oblatas, desde las comunidades locales y el equipo provincial, han salido al paso de algunas urgencias.
Quien quiera colaborar puede hacer llegar su aportación, hasta el 25 de enero, a la cuenta de la congregación en el Banco Santander: ES45 0049512467 2910062319
Más información en el email: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.