El Solemne Traslado Procesional de la Imagen de Nuestro Padre Jesús del Amor en su Entrada Triunfal en Jerusalén, más conocida como La Borriquita, tendrá lugar el sábado 21 de marzo, con salida a las 18,00 horas de la sede canónica, ubicada en la Parroquia de San José (c/ Alcalá 43 – Metro Banco de España - Sevilla) hasta la Parroquia de San Sebastián (c/ Atocha 39).
El Señor del Amor será llevado por sus costaleros en paso de traslado con el siguiente recorrido: Iglesia de San José, Calle Alcalá, Calle del Marqués de Casa Riera, Calle de los Madrazo, Calle Marqués de Cubas, Plaza de las Cortes, Calle del Prado, Calle del Príncipe, Calle de las Huertas, Calle San Sebastián y entrada en la Parroquia de San Sebastián. Desde esta Iglesia, la Hermandad de la Borriquita llevará a cabo su salida procesional y estación de penitencia el Domingo de Ramos, 29 de marzo.
La Parroquia San Juan de Ribera (c/Rodríguez Marín, 57) acoge en este tiempo de preparación cuaresmal una celebración solemne del Vía Crucis con una reliquia de la Santa Cruz (expuesta a la veneración de los fieles por el Cardenal Antonio Maria Rouco Varela).
Cada viernes a las 18,30 horas se celebra un solemne Vía Crucis alternando textos y cantos, con el coro de los Heraldos del Evangelio. Se realiza una procesión por el interior del templo, parando en las catorce estaciones.
El Viernes Santo este Vía Crucis se realizará por las calles de la Parroquia.
En pocos días, en el arciprestazgo de San Federico de la Vicaría VIII, vamos a contar con un nuevo centro que será nuestra casa y la Casa de Todos.
Hemos trabajado sobre todo en los cimientos de esta nueva casa y para ello nos hemos reunido, hemos reflexionado y hemos llegado al convencimiento de que seremos una “Casa para la Esperanza”.
Para poder llegar hasta aquí, nos planteamos diferentes citas y frases para reflexionar y dar sentido al camino que queremos recorrer. Son frases y citas que nos irán recordando aquello que nos impulsa y a las que volveremos una y otra vez para orientar nuestros pasos cuando el camino se nos haga largo, angosto y penoso.
Esto es justo lo que queremos compartir contigo, nuestra guía para crear esta Casa de Todos:
- No tenemos en nuestra mano la solución a los problemas del mundo. Pero frente a los problemas del mundo, tenemos nuestras manos. Con las manos debemos construir el centro, la Casa. No nos quedemos parados. Vamos a acoger, acariciar, apoyar, levantar… Llevamos dentro estos deseos teniendo el corazón como motor. No olvidemos que somos Cáritas.
- Mucha gente pequeña, en muchos lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo. Lo importante en los proyectos es creer en ellos. Ayudar en lo pequeño se convierte en algo grande para los demás.
- Sueño que se sueña solo, puede ser pura ilusión. Sueño que se sueña juntos es señal de solución. Juntos podemos conseguir grandes cosas. “La unión hace la fuerza”, sobre todo si la unión la hacemos por amor, con mucha ilusión y siempre pensando en los que más nos necesitan.
- Hay una gran diferencia entre la gente que espera un milagro y la que lo produce. Para lograr pequeños milagros hay que moverse y aunar esfuerzos en favor del amor y la esperanza.
- Otro mundo posible vendrá si lo soñamos juntos y nos vamos esforzando en hacerlo. Sueños, esperanza, futuro mejor, justicia, alegría, comprensión, fuerza para luchar, ganar de cambiar el mundo, …
- Para que pueda surgir lo posible es preciso intentar una y otra vez lo imposible. La constancia sobre unos cimientos fuertes y adecuados puede construir el proyecto que se proponga y hacerlo realidad.
- No dejéis que nada ni nadie os arrebate la esperanza. Ante la dificultad no nos dejemos llevar por otras motivaciones que pudieran ser más “atractivas”, no nos dejemos llevar por el desanimo. Seamos constantes aunque el fruto no sea inmediato. Contamos con nuestra FE para mantener viva la esperanza.
- La esperanza es peregrinación, no meta. El que busca encuentra. No nos conformemos con lo primero que encontremos, sigamos en la búsqueda para mejorar, sin perder la ilusión, con fortaleza para no claudicar. Contamos con la ORACIÓN como alimento, con la FE como bandera y con JESÚS como maestro y compañero.
Estamos contentos pues pronto la Casa de Todos estará dispuesta y preparada para Todos.