El 28 de julio, domingo, la urbanización Cotos de Monterrey honrará a su patrona, Nuestra Señora de Cotos.
Lo hará con una Misa solemne que dará comienzo a las 13:00 horas en la ermita de Cotos de Monterrey, dependiente de la parroquia de Venturada.
La Eucaristía estará presidida por el párroco, padre Pedro Fozong, C.SS.P.
Dentro de la programación Clásicos en verano 2019, de la Comunidad de Madrid, Isabel Juárez ofrece el concierto de viola Suite de suites.
Se podrá escuchar el sábado 20 de julio, a partir de las 17:00 horas, en la iglesia de San Pedro ad Vincula, de Redueña. Y al día siguiente, domingo 21, a las 19:00 horas, en la iglesia parroquial de Santa Marina Virgen y Mártir de Alameda del Valle.
En ambos casos, la entrada es libre hasta completar el aforo.
Como es tradicional, el cardenal Carlos Osoro, arzobispo de Madrid, presidirá en la catedral de Santa María la Real de la Almudena la Misa de inauguración del curso pastoral 2019-2020 de la Curia diocesana.
Programada para el jueves 5 de septiembre, la Eucaristía dará comienzo a las 12:00 horas.
A la misma están invitados a asistir de modo especial todos los miembros de la Curia y trabajadores de las distintas vicarías y organismos de la diócesis. Al término de la ceremonia, habrá un encuentro festivo en las dependencias del Arzobispado.
Este lunes, 8 de julio, el cardenal Carlos Osoro ha clausurado el Encuentro de Preparación para la Profesión Perpetua, organizado por el Instituto Teológico de Vida Religiosa (ITVR) con la colaboración con la Escuela Regina Apostolorum.
El arzobispo de Madrid ha mantenido un encuentro con los más de 50 jóvenes participantes y ha celebrado la Misa de clausura en un tono de Eucaristía de envío, destacando la riqueza de culturas, naciones y carismas en vísperas del sí definitivo a Dios por medio de la emisión de los votos perpetuos.
En su homilía, los ha invitado a «ponerse en camino como los discípulos para anunciar el Evangelio de nuestro Señor Jesucristo». «Vosotros –ha explicado– estáis en camino llevando el carisma que cada uno de vosotros vivís» y «queréis regalar el Evangelio de Jesucristo desde vuestro carisma». «Tenéis que ir como corderos, es decir, como el mismo Cristo, para regalar el Evangelio a todos los hombres», ha aseverado.
También les ha pedido que salgan con «unas herramientas muy concretas: la sola gracia, el solo amor: solo con Jesucristo». «Todo lo demás –ha detallado– sobra en el camino: el bastón, las sandalias…»; uno no puede «cargarse la mochila de dependencias, ni de adicciones a lugares o tareas».
En este sentido, el purpurado ha recordado a los jóvenes religiosos que el Señor los envía de dos en dos «para corroborar la fuerza del testimonio y de la comunidad» y, al comentar la frase de Jesús «estaba viendo caer a Satanás como un rayo», les ha insistido en que «el sistema de dominación y de poder injusto se desmorona por la acción de Jesús y por la acción de sus discípulos en nombre de Jesús».
Por último, como los discípulos que volvieron llenos de alegría, los ha invitado a dar testimonio de la alegría profunda del encuentro con Jesús por todo el mundo.
18 congregaciones presentes
Del 1 al 8 de julio ha tenido lugar el Encuentro de Preparación para la Profesión Perpetua organizado por el Instituto Teológico de Vida Religiosa que, en su 34ª edición, se ha celebrado en el seminario claretiano de Colmenar Viejo.
Más de medio centenar de jóvenes religiosos y religiosas, procedentes de los cuatro continentes, una veintena de países y pertenecientes a 18 congregaciones religiosas han tenido oportunidad de releer su historia vocacional y profundizar en la decisión definitiva de seguir a Cristo en la vida consagrada.
En vísperas de la profesión perpetua, han tenido ocasión de trabajar los núcleos esenciales de la vida religiosa: vocación, consagración, votos, comunidad, misión… en un clima participativo que combina la exposición doctrinal, el trabajo personal y de grupos, las celebraciones litúrgicas, así como los espacios de oración y convivencia.
El encuentro, que se celebrad desde hace más de 30 años, ha sido coordinado por el director del ITVR, el claretiano Carlos Martínez Oliveras, y ha contado con un equipo formado por tres profesores.
